Los científicos deben involucrarse más en las decisiones que afectan su quehacer y el destino de sus investigaciones. Esa es una de las motivaciones de CIPRES y de ANIP, dos organizaciones que tienen en común la pertenencia de la doctora en química de la Universidad de Concepción Carola Díaz: es vocera de la primera y vicepresidenta de la segunda. Interesada en que la ciencia vaya de la mano con la realidad del país, Díaz se involucró en Iniciativas Populares de Norma y fue a exponer frente a Sistemas de Conocimientos el 8 de febrero pasado. Aquí entrega sus opiniones frente al trabajo y la difícil llegada de las propuesta de la comisión 7 a los Plenos deliberativos.
-Históricamente los temas culturales y científicos han sido desplazados en la institucionalidad chilena. De hecho, son los ministerios más «jóvenes» establecidos por los últimos gobiernos. ¿Cree que la Comisión y sus propuestas han podido paliar en algo esta situación?
«Este tema es muy complejo y es el fruto de problemas que se han arrastrado por años. Es difícil que una comisión formada en la Convención en el último año solucione problemas estructurales en el corto plazo. De todas maneras, la Comisión 7 ha quedado un poco corta atendiendo las necesidades del país y de las comunidades productoras de conocimiento, y eso es una realidad. No hay muchos integrantes del área de las ciencias y la investigación en la comisión, Por lo tanto, es natural que tienda a pasar a segundo plano el tema. Por otro lado, que la Comisión 7 haga propuestas no necesariamente implica que el Pleno las acepte. Es más o menos lo que ha pasado hasta ahora. La ciudadanía espera grandes cambios y eso eclipsa aún más lo que pueda proponerse para las ciencias y las culturas».
«Es difícil que una comisión formada en la Convención en el último año solucione problemas estructurales en el corto plazo».
-¿Cómo evalúa la presencia de los temas científicos en los informes que esta Comisión ha llevado al Pleno y que se han aprobado?
«Honestamente, con las Iniciativas Populares de Norma y las propias de las y los constituyentes nos pusimos muy optimistas. Sin embargo, las sesiones en el Pleno nos han llevado de vuelta a la realidad. Muchas temáticas no se entienden, son muy técnicas o simplemente no son sentidas por el resto de la Convención. En este ejercicio democrático, hay que aceptar las decisiones de las mayorías, pero sigue permaneciendo ese sentimiento desolador de lo poco que nuestra sociedad valora las ciencias y las culturas. Sobre todo el rol de la ciencia en el desarrollo sustentable de nuestro país, el gran potencial y todo lo que debemos resguardar, falta mucho que avanzar. Esperamos que al menos de los informes que quedan algo más se rescate, porque a los dos primeros no les fue muy bien. En fin, igual podemos seguir trabajando por la valorización de nuestro trabajo y lo que significa para el cuidado y avance de nuestros territorios».

-¿Cree que hay una predominancia de los temas artísticos culturales, por encima de los científicos, en los artículos aprobados de la Comisión y los que vienen en el tercer informe?
«Creo que si hay cierta predominancia de temas culturales es por la composición de la Convención y por lo poco y nada que nos involucramos en políticas quienes pertenecemos a las ciencias. A pesar de eso, en el tercer informe hay una propuesta de artículo (el 19, ver recuadro), que es en gran medida columna vertebral para reconocer nuestro papel en la sociedad chilena. En este informe se votó el reconocimiento de la investigación como un trabajo y la existencia de estatutos laborales que rijan el espectro en que nos movemos como trabajadoras y trabajadores de las ciencias y la cultura.
Lamentablemente, fue rechazado y volverá a la Comisión para ser revisado y generar una propuesta nueva. Confiamos en que se pueda aprobar en la siguiente pasada, pues hasta ahora no hay un reconocimiento de las y los investigadores como trabajadores, que es lo más elemental para exigir cualquier regulación en nuestro campo. Al estar invisibilizados, se nos ha precarizado profundamente. Si queremos de verdad desarrollarnos económica, cultural, social y tecnológicamente de manera sostenible, nuestro país debe reconocernos y potenciar la labor de las ciencias. No esperamos estar en una categoría diferente, simplemente poder acceder a lo que todo trabajador y trabajadora merece: dignidad.
«El reconocimiento de las ciencias y cómo impactan a todas y todos, implica una responsabilidad profunda, y que definitivamente no acabará en la convención. Es un trabajo de largo aliento, hablamos de transformar ideas hacia el bien común, donde la generación de conocimiento no está exenta».
En este sentido, reconocemos el trabajo de la Asociación de Investigadores en Postgrado (ANIP) en levantar y promover esta propuesta, y esperamos que las y los constituyentes puedan también valorar esta labor aprobando el artículo».
-¿Qué temas relevantes de los que competen a esta comisión quedan pendientes de abordar y deberían, a su juicio, ser aprobados?
«Varias agrupaciones de las ciencias y las culturas nos unimos para levantar la idea del Conocimiento como bien común. Esta norma dentro de la comisión fue eliminada, al primar visiones distintas de lo que significa investigar y cómo esto impacta a la sociedad. Aún en el país quedan muchos resabios de la individualidad y la competencia, lo que hizo más difícil que agarrara fuerza la idea de que todo conocimiento es un bien de toda la humanidad, es decir, un bien común, y que en el ejercicio de generarlo siempre debe primar el beneficio de nuestra gente y los territorios.
De todas maneras, seguimos trabajando, porque estas ideas son el motor de nuestras organizaciones. Como CIPRES es parte de nuestros ejes principales y no bajaremos los brazos. El reconocimiento de las ciencias y cómo impactan a todas y todos, implica una responsabilidad profunda, y que definitivamente no acabará en la convención. Es un trabajo de largo aliento, hablamos de transformar ideas hacia el bien común, donde la generación de conocimiento no está exenta. El conocimiento como bien común, para el bien común, en algún momento será sentido y trabajaremos para ello». Δ