Esta mañana el Pleno de la Convención tenía tres tareas que parecen burocráticas pero son indispensables para el funcionamiento de ese delicado engranaje que hace posible que la CC funcione. Se realizó la cuenta pública del proceso constituyente, se declaró la prorroga del plazo de entrega de la propuesta Constitucional y se ratificó la Mesa Directiva actual con 114 votos a favor. Serán los encargados de terminar con el proceso constituyente. Si bien la evaluación de la directiva de la CC es positiva desde distintos sectores y la presidenta María Elisa Quinteros “agradece el espaldarazo político” de sus compañeros, la ratificación pasó, principalmente, por un tema de tiempo. Van 260 días desde que comenzó el proceso constituyente y restan 104 para entregar el texto al Presidente de la República. Una nueva votación para otra Mesa Directiva simplemente no cabe dentro de los plazos.

La citación fue a mediodía en el Salón de Honor del ex Congreso y terminó cerca de las 13 horas. María Elisa Quinteros comenzó la cuenta pública con un reconocimiento al trabajo de la mesa anterior presidida por Elisa Loncon y el ex vicepresidente Jaime Bassa, gesto que se recibió entre aplausos, para luego entregar datos duros respecto al trabajo que se ha realizado hasta el momento: se han recibido 5.365 solicitudes de audiencias públicas, de las cuales 1.083 se realizaron, y se admitieron 1.327 iniciativas de norma –incluyendo las indígenas y populares– que fueron distribuidas en 7 comisiones temáticas. Cada una de estas comisiones, luego de cinco meses de trabajo, han realizado entre 50 y 60 sesiones para deliberar, debatir y votar las iniciativas.
Otros datos que ayudan a dimensionar el trabajo: hasta esta mañana se habían celebrado 17 Plenos deliberativos que contemplan la votación de todos los primeros informes de cada comisión. El resultado de este trabajo arroja 84 normas que ya son parte del borrador de la nueva Constitución, con un 80% de aprobación en promedio.
Estos números no expresan las intensas negociaciones, discusiones y diferencias que se viven Pleno a Pleno y que tuvieron su punto de tensión máxima el viernes 18, con decenas de artículos de Sistema político que no consiguieron votos. La presidenta Quinteros asumió que «aún falta un arduo trabajo constituyente, que deberá realizarse en un plazo corto, para cumplir con los tiempos establecidos por la reforma constitucional que creó a esta Convención».

Dentro de la reforma a la que hace alusión la presidenta, se encuentra el Artículo N° 137, que habilita la extensión del plazo inicial de entrega -el 5 de abril del 2022- hasta tres meses después; es decir, el 4 de julio de este año. En la sesión de hoy, la prórroga se hizo efectiva, como había sido asumido desde el inicio del trabajo y estuvo contemplado en todos los cronogramas de trabajo que la CC presentó anteriormente.
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Las apuestas sobre la ratificación de la Mesa apuntaban a que sería un mero trámite. La última en sumarse a las vicepresidencias ampliadas, Giovanna Grandón (Coordinadora Plurinacional), asumió que vivió momentos de «inseguridad» antes de la votación. El factor tiempo, sin embargo, está muy encima de los convencionales: «Nadie quería hacer el cambio con el antecedente de la elección anterior. No podíamos pasar por lo mismo con el tiempo que queda y con las jornadas que tenemos, que son de 12 a 16 horas laborales», declaró Grandón, quien es auxiliar de párvulos y se hizo conocida como «Tía Pikachu».
“Nadie quería hacer el cambio con el antecedente de la elección (de la Mesa Directiva) anterior, no podíamos pasar por lo mismo con el tiempo que queda». Vicepresidenta adjunta Giovanna Grandón (Coordinadora Plurinacional)
Desde los Movimientos Sociales, el colectivo al cual pertenece la presidenta Quinteros, coinciden con el argumento del reloj en contra. Bastián Labbé agregó que existe un factor práctico, como los acuerdos con el ejecutivo y otros organismos, que tienen que mantenerse en favor del tiempo: «Cualquier cambio retrasaría el proceso constituyente». También advierte que existe “un compromiso con una Mesa desde el mundo independiente y de las fuerzas sociales” .
Quinteros y Domínguez están mejor evaluados que sus antecesores Loncon y Bassa entre la derecha. Manuel José Ossandón (RN) cree que «la presidenta Quinteros ha tenido una labor mucho mejor que Elisa Loncon, puesto que ha tomado un cargo más institucional, más apolítico y enfocado en la gestión. Creo que eso ha sido muy importante y se ha visto una diferencia».
De todos modos, Ossandón insiste en que falta espacio de apertura al diálogo para evitar «una cocina de la izquierda». La ratificación era algo que Ossandón esperaba, debido a las fuerzas políticas que respaldan a los y las integrantes. Además hay un factor práctico: «Desde el punto de vista organizacional, quedan muy pocos meses para que se instale una nueva Mesa y le tome la mano a la dirección de este órgano».
“Desde el punto de vista organizacional, nos quedan muy pocos meses para que se instale una nueva Mesa y le tome la mano a la dirección de este órgano”. Manuel José Ossandón (RN)
El convencional de Renovación Nacional sí tiene críticas sobre la consulta indígena, tema del que no se habló en la cuenta pública, aunque fue una de las principales promesas de la Mesa cuando fue electa en enero: «Ha sido un proceso desastroso, a destiempo, con muy poca gente consultada y con normas que han sido aprobadas desde el punto de vista indígena siendo que la consulta tuvo que ser previa», declaró Ossandón.
Para otros sectores de izquierda, las evaluaciones que se pueden hacer hasta ahora no tienen mucho sentido, dado que los resultados de las medidas que ha tomado la Mesa para aprovechar mejor los tiempos aún no muestran sus resultados. «No estamos en condiciones de discutir la elección de una nueva Mesa más allá de las evaluaciones que cada quien haga», dijo Patricio Fernández (CS). El ex director de The Clinic le deseó «la mejor de las suertes en el tiempo que viene» a la Mesa antes de que la sesión comenzara.
Fernández dice valorar a la dupla en la directiva -a Quinteros por la «gestión interna» y a Domínguez «por asumir una vocería»- pero cree que no es el momento de sacar saldos. Ni positivos ni negativos: «La evaluación final, y quizá más dolorosa, va a ser el último día». Δ