En la sesión n°9 de la Comisión de Preámbulo, celebrada hoy en el ex Congreso, la CC llegó a una propuesta en bruto de la introducción a la nueva Carta fundamental. La jornada se volcó a la votación en particular de las enmiendas que modificaron las cinco propuestas de texto introductorio, aprobadas en general en las últimas sesiones. Doce eran las opciones que inicialmente llegaron a la Comisión respectiva y provenían de todos los espacios políticos. Parte de estos textos sirvió como base para escribir la introducción del borrador constitucional.
La misión de los 15 convencionales que componen la Comisión de Preámbulo es redactar una propuesta común sobre los principios fundamentales que definirán el espíritu del borrador constitucional. Y para eso sólo tienen hasta el 31 de mayo. La instancia de hoy fue la última tanda de votaciones antes de editar o armonizar el texto y someterlo a la soberanía del Pleno, día clave que aún no tiene fecha establecida.
La semana pasada, desde el Liceo Domingo Latrille de Tocopilla en la región de Antofagasta, la Comisión votó en general las 12 iniciativas de preámbulo. De todas ellas, los integrantes de la instancia dieron el visto bueno a cinco propuestas. El siguiente paso fue presentar indicaciones -o “enmiendas”, tal como fue denominado por la Comisión- para que cada convencional pudiera incluir sus modificaciones a los textos.
Así, las votaciones en particular se tomaron la tarde de esta jornada, donde los coordinadores, Adriana Cancino (Colectivo Socialista) y Jorge Abarca (independiente), solicitaron revisar y votar cada una de las 35 enmiendas en una jornada que se extendió por cuatro horas.
En la creación de las enmiendas, ya se vivió el primer quiebre político de la Comisión. En sus inicios, estaba pactado que entre todos los integrantes se redactaran textos que pudieran interpretar a cada colectivo en general. De los 15, cinco de ellos no se vieron representados en las enmiendas que se estaban elaborando, por lo que realizaron sus propias modificaciones. Los convencionales que se desmarcan fueron Carolina Videla (PC), Fernando Salinas, Wilfredo Bacián (quechua), Cristina Dorador (MSC) y Lisette Vergara. Aunque Salinas también apoyó enmiendas de otros convencionales.
Las enmiendas de este grupo no tuvieron suerte con la Comisión y no consiguieron modificar ningún párrafo. Quienes tuvieron más suerte fueron los convencionales Jorge Baradit, Elisa Loncon, Luis Barceló, Mario Vargas, María José Oyarzún, Adriana Cancino y Jorge Abarca, quienes consiguieron las únicas cuatro aprobaciones. En la vereda conservadora, Ricardo Neumann, Raúl Celis y Ruth Hurtado no lograron la aprobación de ninguna de sus 19 enmiendas.
La indicación aprobada n°21 fue probablemente la más polémica ya que se refiere directamente a la revuelta social de 2019: “Considerando los dolores del pasado y tras un estallido social, enfrentamos las injusticias y demandas históricas con la fuerza de la juventud, para asumir esta vía institucional a través de una Convención Constitucional ampliamente representativa”. Este extracto se avecina como la principal dificultad para la Comisión de conseguir la aprobación de los ⅔ en el Pleno.
El texto final contiene cuatro párrafos que dicen:
Nosotras y nosotros, el pueblo de Chile, conformado por diversas naciones, nos otorgamos libremente esta Constitución, acordada en un proceso participativo, paritario y democrático.
Considerando los dolores del pasado y tras un estallido social, enfrentamos las injusticias y demandas históricas con la fuerza de la juventud, para asumir esta vía institucional a través de una Convención Constitucional ampliamente representativa.
Con ello, hemos decidido mirar hacia el futuro con esperanza y cambiar nuestro destino sin importar el origen, condición o creencias de cada cual; para construir una sociedad justa, consciente de su relación indisoluble con la naturaleza amenazada por la crisis climática, que promueva una cultura de paz y diálogo, con un compromiso profundo por los Derechos Humanos, la justicia, igualdad y libertad.
De esta manera, en ejercicio del poder constituyente, adoptamos la siguiente Constitución Política de la República de Chile.
Se espera que mañana los convencionales revisen el texto en su totalidad para armonizar, de ser necesario, con la asesora de la Secretaría Técnica, Claudia Poblete, doctora en Lingüística y experta en lenguaje jurídico, quien revisará el texto final para crear un informe de sugerencias. Como coordinación, se decidió que la firma del documento tendrá como lugar de origen a Tocopilla, escenario que albergó la primera sesión de la Comisión. Así, estas etapas finalizarán con el envío del texto al Pleno para ser votado como única posibilidad de preámbulo. Δ