El solo anuncio fue motivo de expectación. Un grupo de constituyentes, esta vez liderado por el convencional Christian Viera (D17), que ofició de portavoz para las explicaciones, presentó una iniciativa que promueve eliminar el Tribunal Constitucional (TC) de la nueva Constitución. Junto a él, entre otros, estaban los constituyentes Jennifer Mella (D5), Manuela Royo (D23), Mauricio Daza (D28) y Hugo Gutiérrez (D2).
Se trata de una moción que sepulta el futuro de un órgano del Estado muy controvertido. El TC es autónomo e independiente de otra autoridad o poder y en contra de sus resoluciones no proceden recursos algunos, salvo del propio TC que puede rectificar sus errores.
«Obedece a múltiples razones, principalmente el desprestigio de un tribunal que se ha transformado, en la práctica, en un legislador, la tercera cámara. Pero sobre todo para actualizar el tipo de control en términos democráticos». Christian Viera (D17), explicando las razones de esta propuesta.
Según explica su propia orgánica, sus competencias son cuatro:
- Control de constitucionalidad, con control preventivo y posterior de preceptos legales, incluidos los decretos con fuerza de ley, los proyectos de reforma constitucional, los tratados internacionales sometidos a la aprobación del Congreso y cuestiones de constitucionalidad de acciones de los Tribunales Superiores de Justicia y del Tribunal Calificador de Elecciones.
- Solución de contiendas de competencia entre las autoridades políticas y administrativas y los tribunales de justicia que no correspondan al Senado.
- Pronunciamiento sobre inhabilidades, incompatibilidades, renuncias y causales de cesación en el cargo de los titulares de ciertos órganos, como la Presidencia de la República, el Parlamento y los ministerios.
- Pronunciamiento sobre ilícitos constitucionales de organizaciones, movimientos o partidos políticos y el Presidente de la República en ejercicio o del electo.
Los convencionales liderados por Viera, explicaron qué, desde su perspectiva, no cabe una nueva reforma sino que un reemplazo: «Obedece a múltiples razones, principalmente el desprestigio de un tribunal que se ha transformado, en la práctica, en un legislador, la tercera cámara. Pero sobre todo para actualizar el tipo de control en términos democráticos».
Viera, abogado y doctor en derecho por la Universidad de Deusto (España), añadió que el contenido de la propuesta busca hacer desaparecer el control preventivo del TC, que se realiza antes que la ley sea promulgada y esté vigente: «Como pueden advertir, en ese tipo de control, el TC en múltiples ejemplos que podríamos dar, se transformó en un legislador negativo».
«Esta iniciativa es un retroceso de 50 años de evolución constitucional (…) Es bastante contraproducente con lo que ha tratado de mostrar la coalición de Gabriel Boric para lo que es la conformación del nuevo gobierno». Ruggero Cozzi (D6)
La iniciativa también busca acabar con el control represivo, que se realiza con posterioridad a que la ley está vigente. La norma de los convencionales propone que ese control caiga en la Corte Suprema. Viera señaló. «Ojo no desaparece el control de la ley, cambia el órgano que la controla». Finalmente se cambia un tipo de control «más técnico». Según Viera explicó, se propone «un control débil», con un análisis del propio Congreso, pero sin carácter derogatorio, en el caso de que se acoja la inconstitucionalidad de una ley.

Uno de los patrocinantes, Mauricio Daza, afirmó que -desde su perspectiva- el «Tribunal Constitucional no es sinónimo de justicia constitucional». A cambio, la abogada Marisol Peña, ex integrante del tribunal, quien dijo desconocer el detalle de esta iniciativa de norma, expresó: «Chile se merece un TC. No borremos con el codo lo que hemos escrito».
En la misma línea que Peña, Ruggero Cozzi (D6) y militante de RN, se mostró contrario a la sola idea de acabar con el TC: «Esta iniciativa es un retroceso de 50 años de evolución constitucional». Y añadió: «Es bastante contraproducente con lo que ha tratado de mostrar la coalición de (el presidente electo) Gabriel Boric para lo que es la conformación del nuevo gobierno».
Boric, que asumirá el 11 de marzo próximo, fue electo como candidato de la coalición de izquierda Convergencia Social. Prometió en su primer discurso ser el presidente de quienes votaron por su proyecto, «de quienes eligieron otra alternativa y también de quienes no concurrieron a votar». Aseguró, no obstante, la defensa del proceso constituyente y en especial de su autonomía. Δ
¿QUÉ ES EL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL?
El TC es un órgano jurisdiccional del Estado chileno. Fue creado en 1970, disuelto en 1973 -después del golpe militar- y repuesto por la Constitución de 1980, cuyo reemplazo está trabajando la Convención Constitucional. Fue modificado en 2005, durante un proceso de reforma constitucional. Está compuesto por diez miembros -los ministros titulares- y dos ministros suplentes. De ellos, tres son de libre designación del Presidente de la República; tres son designados directamente por la Corte Suprema en votación secreta, y cuatro son elegidos por el Congreso Nacional: dos nombrados directamente por el Senado y otros dos nombrados por el Senado pero a propuesta de la Cámara de Diputadas y Diputados. Su actual presidente, nombrado en agosto de 2021, es el abogado y juez Juan José Romero Guzmán.