Por Karla Díaz (El Sol de México)
Aunque por años los seres humanos han fomentado el reciclaje como una acción que propone una solución al impacto negativo en el planeta provocado por los residuos, dicha premisa puede distar de la realidad. El reciclaje puede considerarse como un deber ciudadano para contrarrestar nuestra huella en el planeta. Pese a que esto no es una mentira, organizaciones defensoras del medio ambiente como Greenpeace aseguran que es, como coloquialmente se dice, tapar el sol con un dedo.
En su informe Reciclar: la falacia de la industria en la lucha contra la contaminación plástica, la ONG destacó que la solución no está en solo reciclar, pues además la sociedad en su conjunto debe reducir la producción y el consumo de plásticos de un solo uso. Asimismo, acusa a las grandes industrias de evadir su responsabilidad y de lucrar con el reciclaje.

“Las corporaciones nos han dicho que reciclar es la mejor forma en la que podemos contribuir a preservar el medio ambiente, pero en realidad no nos están diciendo toda la información que saben al respecto”, detalló la organización.
En 2018, el Foro Económico Mundial y la Fundación Ellen MacArthur afirmaron en el reporte La nueva economía de los plásticos que las empresas podrían recuperar entre 80 mil y 120 mil millones de dólares al reciclar, en lugar de desechar los plásticos que producen.
“Bajo el argumento de que así contribuyen a cuidar al medioambiente, las corporaciones iniciaron campañas masivas a favor de reciclar y decidieron hacer de su responsabilidad un negocio”, precisó Greenpeace, por lo que insistió que la solución real está en dejar de producir plásticos y desarrollar tecnologías para generar materiales menos contaminantes.
Según Greenpeace, a lo largo de la historia solo se ha reciclado menos del 10 por ciento del plástico que se produce en el mundo.
Según la organización, a lo largo de la historia solo se ha reciclado menos del 10 por ciento del plástico que se produce a nivel mundial, lo que, evidentemente, no atiende a la emergencia plástica actual, pues se estima que hasta 12,7 millones de toneladas de plástico ingresan al océano cada año, lo “equivalente a un camión lleno de desechos de este material que se vierte en las costas cada minuto”.
De igual manera, el documento asegura lo que quizá no es tan evidente: no todo el plástico es reciclable, pues en algunos casos para su reutilización se requieren procesos químicos costosos y más contaminantes, tal es el caso de envases de colores o serigrafiados, tubos de pasta dental, encendedores desechables o bolsas de frituras, entre otros.
Se estima que hasta 12,7 millones de toneladas de plástico ingresan al océano cada año, lo equivalente a un camión lleno de desechos de este material que se vierte en las costas cada minuto.
En la Cumbre Mundial de los Océanos realizada en marzo de 2018, se enfatizó que los océanos no tienen tiempo para esperar soluciones a largo plazo, por lo que parece una solución más eficaz la eliminación de los plásticos de un solo uso. “Lamentablemente, en lugar de buscar cómo eliminar su uso, la innovación de la industria se centra en nuevas formas de recolectar y reciclar el plástico para darle una nueva utilidad. Según ellos ‘si el plástico se recicla, entonces ya no es de un solo uso’”, expresó Greenpeace.

El informe señaló que el plástico es el residuo sólido que más incremento ha registrado, al pasar de 1,38 millones de toneladas en 2001 a 4,58 millones en 2012, es decir, registró un aumento del 232,4 por ciento.
En lugar de reciclar, las corporaciones podrían empezar a reducir la producción de embalaje plástico, propone el informe. Además, pide que se innoven modelos de negocios que sean cero plásticos en la producción y distribución de sus productos, así como elegir etiquetados y presentaciones que no hagan del plástico un material inservible para reciclar.
Todo esto traería un impacto en la economía de las grandes corporaciones, pues involucra la contratación de personal para este sector, pero indica que lo anterior se ha convertido en el argumento perfecto para no dar paso a la transición.
Cada minuto cae al mar el equivalente a una tonelada de basura, lo que “mata anualmente a cien mil mamíferos y un millón de aves marinas” por causa de la ingesta de plásticos.
Mientras tanto, según datos de Greenpeace, cada minuto cae al mar lo equivalente a una tonelada de basura, lo que “mata anualmente a cien mil mamíferos y un millón de aves marinas” por causa de la ingesta de plásticos. “Otros mueren por enredos, asfixia, estrangulación o desnutrición por estos desechos”, expresó.
Lo anterior agrega una consecuencia más a la lista: la baja en el turismo. La presencia de basura en el mar puede desincentivar el turismo, que a su vez se traduce en pérdida de ingresos y empleos, según la ONU.

Greenpeace señala que los plásticos de origen biológico están hechos parcialmente de material vegetal, como maíz o caña de azúcar, pero el resto de su composición sigue siendo de origen fósil. Situación similar pasa con los materiales biodegradables, que requieren de condiciones específicas de calor y humedad para degradarse, las cuales no existen en la naturaleza, por lo que no desaparecen automáticamente. Asimismo, los plásticos compostables no pueden compostarse en los hogares, ya que están diseñados para descomponerse bajo ciertas condiciones que se dan exclusivamente en instalaciones de compostaje industrial.
Aunque solo se ha reciclado el 10 por ciento de la producción total de plásticos en el mundo, mientras las prohibiciones de plásticos de un solo uso no sean una realidad y las grandes compañías no innoven en la producción de los artículos, el reciclaje sigue siendo una opción para contrarrestar el impacto ambiental de la epidemia plástica.
Aunque solo se ha reciclado el 10 por ciento de la producción total de plásticos en el mundo, por ahora, el reciclaje sigue siendo una opción para contrarrestar el impacto ambiental de la epidemia plástica.
El hecho de separar los residuos adecuadamente permitirá concebirlos como los subproductos del consumo que pueden regresar a nuevas cadenas de producción.
Muchos de ellos tienen un gran valor comercial en el mercado del reciclaje: tales como las botellas de agua y otras bebidas (polietileno tereftalato o PET), las botellas de plástico opaco (polietileno de alta densidad o PEAD), el papel, cartón, vidrio, envases multilaminados (tetrapak) y las latas.
Ahora sí, entonces ¿qué hacer con los residuos? La clave está, según Patagonia, una marca que enseña a arreglar las prendas desde casa, en las cinco Rs: rechazar, reducir, reutilizar, reciclar y reintegrar, justo en ese orden que ha dictado el movimiento zero waste.
“Rechazas lo que no necesitas, reduces el consumo de lo que no puedes reusar, reutilizas lo que no puedes rechazar o reducir, reciclas lo que no puedes rechazar, reducir o reutilizar y, finalmente, reintegras lo que puedes hacer como composta (desechos orgánicos)”, expresó Patagonia en un comunicado.
¿Qué hacer con los residuos? La clave está, según Patagonia, una marca que enseña a arreglar las prendas desde casa, en las cinco R: rechazar, reducir, reutilizar, reciclar y reintegrar, justo en ese orden que ha dictado el movimiento zero waste.
Con lo anterior, lo que se ha planteado es la adopción de una economía circular, es decir, sustituir el proceso lineal de extracción, uso y desecho de recursos por otro que preserve la riqueza material. Dicho modelo ha sido definido por la fundación Ellen MacArthur, como un “sistema regenerativo y restaurador que busca mantener en su nivel más alto de valor los productos, componentes y materiales, mediante el aprovechamiento eficaz de los recursos y la preservación del capital natural”.
La economía circular busca la recuperación y reciclaje de materias primas, la utilización de energías renovables y sugiere como opción y el alquiler de bienes en vez de su compra, todo para disminuir el impacto ambiental.

Existen otras opciones que también involucran un proceso de reciclaje, por ejemplo el ya famoso Do It Yourself (DIY), también conocido como “hazlo tú mismo”.
De acuerdo con Patagonia, el DIY es una manera de contrarrestar el consumismo y disminuir nuestros desechos. “Básicamente, DIY se traduce como ‘hazlo tú misma o tú mismo’. Una definición sencilla del concepto es la creación, modificación o reparación de objetos sin ayuda de un especialista ni a través de la producción industrial”, aseguró.
Según detalló Patagonia, esta alternativa tiene sus orígenes el movimiento punk de la década de los 70 del siglo pasado, y se basaba en la confección autónoma de la ropa, la autogestión e intervención de publicaciones e imágenes.
El DIY abarca muchos aspectos: desde pequeñas reparaciones en casa, hasta la autopublicación de revistas o gacetas, o el armado de nuevos dispositivos electrónicos con los componentes de aparatos viejos entre otras alternativas.
A partir de hoy -y al menos hasta el martes 28 de septiembre- «Votamos Todos Noticias» publicará cada día un reportaje dedicado al Medio Ambiente. Se trata de material facilitado por una extensa red de medios del mundo, que se han unido bajo la bandera medioambiental para celebrar el Día Mundial de las Noticias 2021. Es una jornada que reunirá a más de 300 organizaciones de noticias, para arrojar luz sobre el papel fundamental del periodismo global basado en hechos en la actual y preocupante crisis del cambio climático.
Para VTN formar parte es fundamental. Se trata de un tema urgente y cuyo desarrollo pone a prueba nuestra capacidad de evolucionar como colectivo. La tarea es legar a las futuras generaciones un mundo mejor y más consciente con Gaia, el ser que nos contiene y viaja con nosotros en el Universo.
Este tema será, no nos cabe duda alguna, un agente de profundos debates -y probables avances significativos para Chile- gracias a la Convención Constituyente en los próximos meses, dada la posición favorable respecto del tema que han revelado, tanto una amplia mayoría de los convencionales electos como aquellas personas que aspiraban a formar parte de este proceso y que participaron respondiendo las preguntas de nuestra app.
En ella había una serie de preguntas, que también contestaron los votantes, destinadas a conocer la visión sobre el Medio Ambiente -y sus temas asociados más relevantes- de los aspirantes a ocupar un escaño en la CC. Δ